viernes, 15 de febrero de 2013

No sobreprotejas a tus hijos




Cuando era niña, yo nunca me enteraba si algo malo pasaba en la familia, nunca me decían nada, me mantenían dentro de una esfera de cristal para que nada me tocara, sobreprotegida al máximo. Mi madre pensaba que esto era por mi bien, ella lo hacía por amor, pero...cuando crecí, me dí cuenta de lo malo que es esto. Fue muy difícil enfrentarme a la vida por causa de la sobreprotección de la que fui "víctima" de niña.Por evitarles sufrimientos leves a los hijos, algunos padres les ocasionan sufrimientos mayores a futuro. La sobreprotección impide que los hijos vean la vida tal cual es, para que después sepan a qué se van a enfrentar. Se vuelven dependientes, temerosos, inseguros. Hay que dejarlos salir del cascarón. Va a llegar un momento en la vida en que los padres ya no van a estar y los hijos van a tener que enfrentar la vida solos y ¿cómo, si no fueron preparados?, les va a costar mucho más. No es malo que los hijos se enteren si hay problemas en la casa, de acuerdo a su edad, se les puede explicar lo que pasa, no para asustarlos o preocuparlos, sino para hacerlos sentir parte de ese equipo que se llama familia y que en las buenas y en las malas ha de estar unido. Si el padre se queda sin trabajo, por ejemplo, requiere más que nunca el apoyo de su familia.Es bueno enseñar a los hijos desde pequeñitos a valorar el trabajo de su padre, sea cual sea e inculcarles un espíritu de cooperación dentro de la familia, enseñándoles a involucrarse y participar cuando la situación así lo requiera. Hay que enseñarles a crear conciencia en cuanto a los gastos de la luz, agua, etc., además, estos son detalles que se convertirán en hábitos y se evitarán muchos malos ratos en la vida. Hay que enseñarles el valor de las cosas, hay hijos que están acostumbrados a pedir y pedir y que se les dé todo, no, hay que enseñarlos a dar. Que se den cuenta de que ellos también deben cooperar y ser útiles cuando las cosas no van bien en casa. Todas estas cosas, hasta los más mínimos detalles, pienso que son lecciones de vida para los hijos, es enseñarles a ser parte de la solución, para que en un futuro sepan qué hacer y cómo hacer, cuando se enfrenten a una situación difícil. Dios nos ha dado la mayordomía de nuestros hijos, para enseñarles a vivir en amor y enfrentar la vida. No los oprimamos, enseñémosles a valerse por sí mismos, como las águilas.He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre. Salmo 127:3

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